martes, 28 de julio de 2009

INTRODUCCION


La contabilidad como técnica se compone de varios elementos, entre los cuales están los siguientes: números, unidades monetarias, papel, métodos de captura, normas, profesionistas, etcétera. Estos elementos no se dieron de la noche a la mañana, sino que aparecen a lo largo de la historia misma de la humanidad.

Lo más importante en este aspecto es identificar las aportaciones a la contabilidad en cada época, y la aplicación que se le dio en ese tiempo.

Invenciones tales como las tablillas de barro, la escritura cuneiforme, el sistema de pesas y medidas, la posición y registro de cantidades, las operaciones matemáti­cas, la escritura pictográfica y jeroglífica, el papiro y la moneda, corresponden a la Época Antigua. La técnica contable aplicó dichas innovaciones en el control y sim­plificación del comercio y en el sistema de recaudación de impuestos.

Es en el Renacimiento donde se dan los dos acontecimientos considerados mayor importancia para la contabilidad: la invención de la imprenta y el registro de las operaciones mercantiles bajo la partida doble, ayudando al perfeccionamiento de la técnica contable.
En la Revolución Industrial se le da validez oficial a la profesión contable y surge el mercantilismo y la industria.

La reglamentación de la actividad contable, así como los reportes públicos de mayor calidad se dan hasta la Época Contemporánea.

El nuevo milenio se ubica en un ambiente de globalización de la economía y de internacionalización de los mercados financieros, de tal modo que la contabilidad habrá de adaptarse a las nuevas necesidades de los diferentes usuarios.


“ La contabilidad debe obtener una practica de conocimientos profesionales y de excelente calidad para administra con mayor facilidad y tener disposición en la cual puede adquirir una técnica contable con superior importancia y así podrá lograr dentro su empresa.”

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